El pasado 14 de agosto, tuvimos el honor de hablar con el filósofo Bernardo Toro. Actualmente desempeña labores de asesor presidencial en la Fundación Avina, organización latinoamericana a cargo de promover la sustentabilidad a partir de procesos colaborativos entre emprendedores, empresas, instituciones gubernamentales, sectores académicos, entre otros.
La inspiración por un cambio
El interés de Bernardo por el cambio climático se remonta a la década del 90. En los inicios de ese decenio, Toro realizaba consultorías a los diferentes estados de Brasil. En una de esas actividades, una colega brasileña llamada Nycia Verneck, le entrega un libro escrito por Leonardo Boff, teólogo brasileño, llamado Saber cuidar.
Pasó el tiempo y a finales de los 90’ Bernardo cuenta que comenzó a analizar la situación global, en particular el cambio climático, el hambre y la guerra que había en su país natal (Colombia). Hundido en sus pensamientos, dió con el libro entregado por Nycia y notó una nota escrita por la misma la que decía: “este libro es muy importante para el futuro”.
A lo largo de los años, la relación entre Bernardo y Leonardo Boff fue creciendo cada vez más. Este último comenzó a ser invitado a conferencias y reuniones en las que Toro era partícipe.
Así lo cuenta Bernardo Toro en la entrevista realizada por Fundación Basura: “Hicimos una reunión larga en Sao Paulo con Leonardo y un equipo de Avina para ver cómo hacer una estrategia latinoamericana. Leonardo dijo “yo escribo y usted póngale patitas a esto””.
Bernardo Toro y la pandemia
“Ayer yo decía en una conferencia frente a un montón de académicos, aquí en Colombia, que la pandemia está siendo el acto pedagógico que necesitábamos para poder enfrentar la crisis climática. Nosotros no le estamos poniendo cuidado, porque la crisis climática es acumulativa, va de poco a poco y nosotros no estamos acostumbrados a riesgos acumulativos. Por eso nos comportamos como nos comportamos, porque no somos capaces de ver estos riesgos”, cuenta Bernardo Toro.
Además, Bernardo menciona que la pandemia, al tener efecto inmediato, ya sea en muertes o enfermos, sumado a un modelo de incertidumbre, nos está enseñando a trabajar colectivamente y este método es sumamente importante para poder enfrentar la crisis climática de forma correcta.
“(La pandemia) nos está enseñando la fragilidad que tenemos con los entornos y que un virus invisible nos está afectando mucho y que no hay donde huir. Por otro lado, la crisis climática tiene la lógica que pronto “yo me voy más arriba o más abajo o Holanda” (…) Estamos recibiendo la pedagogía y las conversaciones para poder afrontar la crisis climática”, comenta Bernardo Toro en la entrevista.
El punto más importante que rescata Bernardo Toro es que, la crisis sanitaria producto del COVID-19, nos ha mostrado que somos una especie que puede perecer. A su vez, menciona: “La pandemia no va a matar como especie, pero la crisis climática, si nos puede matar”.
Detener la crisis con cambios
En la actualidad, Bernardo hace énfasis en que los cambios que pueden ayudar a detener la crisis ambiental que hoy vivimos, van de la mano con la educación otorgada en la familia e instituciones, además de la organización, resaltando el uso de redes sociales, siempre con un mismo propósito en frente. Por otro lado, destaca el liderazgo que los jóvenes tienen para poder generar el cambio, acotando que: “Greta Thunberg ha logrado mucho más en un año que muchos dirigentes políticos”.
Para lograr ese tan anhelado cambio, Bernardo Toro reflexiona que es importante la formación ética del cuidado, por este concepto se refiere a que los principios éticos de la población sean siempre el cuidado de los derechos humanos y del planeta.
“Es una tarea enorme que sólo se puede hacer a través de procesos de conversación y de opción continua y práctica. Esto nos va dando la luz de cuál es la nueva legislación laboral que se requiere, el nuevo modelo económico de economía circular (…) En estos momentos tan difíciles, la ciencia debe preceder a la política (…) pero la ciencia no precede a la ética, entendida para hacer posible la dignidad humana y el cuidado del planeta”.