En medio de la crisis climática, la ONU ha estimado que entre el 8 y el 10% de las emisiones de gases de efecto invernadero están asociadas con comida que no se consume. Para contribuir a disminuir o erradicar esta situación, te mostramos cómo expandir la vida útil de tus alimentos.

Por: Javiera Castro.

En el año 2021, el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) desarrolló un «Índice de desperdicios de alimentos», en el que se expuso que, en 2019, el 17% de la producción total de alimentos del mundo fue a parar a la basura, es decir, 931 millones de toneladas de comida desperdiciada.

En América Latina, cada persona desperdicia en promedio 121 kg de comida al año, por lo que es importante conocer maneras de extender la durabilidad de los alimentos.

En primer lugar, es importante saber que la temperatura del refrigerador no debe superar los 5 grados centígrados, ya que mientras más baja esté la temperatura, más lento será el crecimiento de los microorganismos que dañan los alimentos. Sin embargo, hay que ser cuidadosos, ya que las verduras, frutas y hortalizas no deben estar bajo los 0 grados.

Segundo, es fundamental que no pase mucho tiempo desde la adquisición de los alimentos y su refrigerado, así se evita que se rompa la cadena de frío, ya que si esto ocurre pueden aparecer malos olores en el producto y existe un mayor riesgo de intoxicación al consumir el alimento en mal estado.

También, es importante saber que dentro del refrigerador cada alimento tiene un sitio con una temperatura idónea para su conservación. Así deberías organizar tu nevera: los alimentos procesados deben colocarse en la puerta (zona menos fría), como bebidas y salsas de mesa; los lácteos, embutidos y platos cocinados deben ir en los estantes superiores (zona fría); en los estantes medios o bajos (zona más fría) deben ir las carnes y pescados crudos o alimentos por descongelar, y en el cajón inferior (zona poco fría) deben ir las frutas y verduras, ya que el frío excesivo podría deteriorarlas.

Ahora algunos tips:

1. En el caso de frutas y verduras, es recomendable lavarlas y secarlas por completo antes de meterlas al refrigerador, esto con el fin de eliminar bacterias que puedan producir fermentaciones y putrefacciones. Es importante que al guardarlas sean puestas en un recipiente y tapadas con un papel de cocina, así absorberá el exceso de agua que se pueda formar en el ambiente frío.
2. Otra forma de conservar las verduras es guardarlas dentro de bolsas con perforaciones, esto para que el aire circule dentro de la bolsa, pero sin dejar que se pierda mucha humedad.
3. Es crucial guardar los alimentos en envases herméticos, ya sea tapers o bolsas herméticas, nunca en platos, ya que tal exposición podría producir contaminación cruzada entre alimentos (transferencia de microorganismos como bacterias, virus o parásitos) o quemaduras por el frío.
4. Cuidar y mantener los alimentos como el cilantro, espárragos y apio, tal como flores, es decir, ponerlas en un vaso con agua y hacer recambio de esta cada dos o tres días, esto ayudará a que duren más tiempo.

Otra alternativa para conservar tus alimentos durante más tiempo es la deshidratación, proceso en el que se elimina prácticamente la totalidad del agua de un alimento a través del calor. En esta práctica no se ven alterados los nutrientes, vitaminas ni minerales de los alimentos tratados. Ketran Del Valle es un fabricante de deshidratadores solares, es decir, dispositivos que utilizan la radiación solar para calentar aire y así retirar el agua de los alimentos, haciendo posible conservarlos secos hasta por un año. Esta es una buena opción al deshidratar las frutas y verduras de temporada con energía solar limpia y gratuita del sol.

Los Bumiwraps también son una buena opción para conservar los alimentos y, mejor aún, lejos de los plásticos. Son envoltorios reutilizables y compostables que pueden durar hasta un año, hechos de ingredientes naturales y con la finalidad de almacenar alimentos o cubrir recipientes. En Bumi Lifestyle, que cuenta con el sello Basura Cero de Fundación Basura, puedes adquirirlos y, al finalizar su vida útil, puedes llevarlo, ya sea para ser compostado o que sea dejado como nuevo de manera gratuita (solo una vez).

Te mostramos cómo extender la durabilidad de algunos tus alimentos:

• Ajo: Mantener en un lugar fresco y seco, de preferencia oscuro
• Lechuga: Guardarla envuelta en papel de cocina dentro del refrigerador.
• Pepinos: Únicamente deben ser refrigerados, no es necesario envoltorio, ya que su piel los hace resistentes.
• Cebollas y papas: Ambas van fuera del refrigerador pero lejos entre sí, ya que las papas absorben humedad, lo que reseca las cebollas.
• Frutillas: Ponerlas en la parte más fría del refrigerador, cubiertas con papel film, esto para evitar que se pudran tan rápido.
• Zanahoria: Para refrigerar, primero debes lavarlas, pelarlas e introducirlas en un envase hermético cubierto de agua fría.
• Manzanas: Dejar fuera del refrigerador y lejos de las verduras, ya que el gas que estas producen, aceleran demasiado la maduración.
• Pescado: Lavar, salar y luego guardarlo en una bolsa, preferentemente al vacío para refrigerar.